Quiero compartir contigo algunas de los lugares existenciales, experiencias, acontecimientos, personas sin las que esta propuesta de EI no podría ser una realidad.
DATOS BIO-GRÁFICOS:
Nací un 30 de enero (día del asesinato de Gandhi, el alma grande...) de 1968.
La Vida quiso situarme en mis primeros pasos en la muy noble Villa de Portugalete, en Bizkaia. Durante mis primeros veintiún años de vida, cruzar el Puente Colgante era algo casi diario y natural. El Puente Colgante de Portugalete o Puente de Bizkaia, Patrimonio de la Humanidad (lo estás viendo como imagen de fondo). Lo llevo en mi corazón porque ha dejado en mí un impulso hacia eso de tender puentes, de intentar siempre buscar puntos de encuentro. No es anecdótico, sino que forma parte irrenunciable y central de mi modo de entender la vida y también, claro está, la Educación de la Interioridad (EI).
Por haber nacido en la desembocadura de la ría del Nervión, la mar se me ha quedado dentro, la mar... el mar... La inmensidad que nos acoge, lo profundo que atrae y, a la vez, da vértigo, mar bravío y mar en calma, la travesía... también todo esto está por entre medio de lo que desde aquí compartiré.
Desde estas líneas también debo rendir homenaje a la congregración de las Hermanas de La Caridad de Santa Ana. Estudié en su colegio de Portugalete. En los pasillos del colegios del Carmen, se gestaron encuentros, soledades y decisiones que cambiaron mi vida y dejaron huella hasta el día de hoy. Mucho de lo que aplico en la dinamización de grupos, proviene de mis aprendizajes y vivencias con "las Anas".
En el año 1989 dejo Portugalete y comienza para mí un periplo vital de veintiún años antes de volver a vivir en Euskadi. El 15 de enero de 1997, en Zaragoza, se produce en mi persona un "antes y un después" . Tras haber vivido en diferentes ciudades de España y un año en Roma, finalmente el año 1999, impelida por eso nuevo que está naciendo en mí ("Algo nuevo está naciendo, ¿no lo notáis?" Is 43, 19), recalo sin haberlo preparado ni esperado, en Barcelona que será el lugar donde viva diez años de intenso renacer interior. Es ahí, en esos años en Barcelona, donde sitúo la génesis de lo que ahora es un paradigma educativo. Primero con mis queridos alumnos y alumnas del colegio Mare de Déu del Roser de la RR Adoratrices, en el que trabajé durante cuatro años y donde realmente creé la semilla inicial de este sistema. En este punto es de obligación dar un gracias enorme a Josep Otón y a Jordi Osúa, juntos y un poco como "laboratorio pastoral" el año 1999 creamos los "Talleres de Interioridad", semilla de lo que llevo veinte años proponiendo a chavales y profesores. Después con la creación y puesta en marcha del Casal Lluís Espinal dentro de la Casa de Espiritualidad de la Cova De Sant Ignasi de los PP Jesuitas, en Manresa, llegó otra fase de nueva creación y de profundización. Durante el tiempo trabajando en el Casal, comienzo a ofrecer formación a grupos de profesores y profesoras, por ello tuve que concretar más y mejor la pedagogía empleada, las preguntas de los educadores me hicieron "ir más allá". También en esos años, grabo y publico con Editorial San Pablo un CD: "Gustar a Dios". Los seis años en Manresa me inspiraron un sinfín de canciones para la oración y, gracias a la insistencia de Guillermo Bendicho, querido amigo y compañero de deliciosos momentos musicales, vio la luz el año 2006. El año 2009 ve la luz mi primer libro: "La Educación de la Interioridad, una propuesta para Secundaria y Bachillerato" Ed. CCS. En ese libro pude volcar algo del constructo teórico que nació en Manresa y que da sentido a la propuesta práctica de la EI según yo la entiendo. No puedo en este espacio compartir el listado largo de nombres propios que hay detrás de estos pocos datos, serían muchos... y es que la Vida se gesta en los Encuentros con personas que nos inspiran, que nos ayudan, que nos confrontan, que nos descubren nuevos horizontes, que nos dan oportunidades, que creen en nosotros. Personas así han enriquecido y enriquecen mi vida. Desde aquí a cada una le doy mi más amoroso y sincero GRACIAS. Debo agradecer más en concreto, la vida de cada adolescente y joven que tuve como alumnos/as en el colegio y a los que asistieron a los ciento de talleres, convivencias y retiros celebrados durante seis años en el Casal, ellos y ellas me enseñaron, me hicieron repensar todo, recrear dinámicas, añadir matices y, sobre todo, me educaron como maestra con sus reacciones y peticiones.
El año 2009 señala mi despedida de Barcelona y el regreso al País Vasco veintiún años después de haberme marchado. La Diócesis de Vitoria-Gasteiz me invita a vivir y trabajar en esa hermosa ciudad. Durante cinco años volví a ser aprendiz de la Vida mientras ponía en marcha un proyecto educativo de EI para las escuelas que configuran EGIBIDE (Proyecto IZAN) y otro diocesano para la renovación de los procesos catequéticos (Proyecto DEBIR). Fue un tiempo bellísimo (¡y frío...nevada tras nevada!), tiempo de volver a empezar y de descubrir capacidades nuevas. Nunca agradeceré lo bastante al equipo diocesano de esos años, la acogida, el cuidado y la confianza tan grande que depositaron en mí. De nuevo demasiados nombres propios para situarlos aquí pero es de justicia recordar la confianza que depositaron en mí el entonces obispo de Vitoria Don Miguel Asurmendi (DEP), Fernando Otadui entonces vicario de la ciudad que no dudó en "remangarse" y ayudarme con el traslado en furgoneta de muebles y pertenencias desde Barcelona, a Álvaro Chordi que era en ese momento delegado de jóvenes y a su sucesor después César Fernandez que es desde entonces querido amigo y para mí ejemplo de humanidad y cercanía. Eskerrik asko, bihotz, bihoteztik!!
El año 2009 me regaló también poder crear y ofrecer por primera vez un curso formativo cuyo esquema, estilo... perdura hasta hoy con las variantes necesarias. Fue de la mano de la querida familia lasaliana. Los Hermanos de La Salle, a través del genial José Ángel Múgica, me invitan a pensar qué camino formativo sería el mejor para poder ellos crear y poner en marcha una propuesta pedagógica de EI. Con sus profesores de Euskadi y después de toda España, aprendí a crear e impartir cursos más largos y mejor estructurados y, en medio de todo ello, descubrí una familia acogedora y creativa, apasionada por la educación: la familia lasaliana de la que me he ido sintiendo cada vez más y más parte. Entronca en esta relación con el mundo lasaliano, la propuesta de poner en marcha un posgrado Experto Universitario en Educación de la Interioridad en el Campus La Salle Aravaca. Llevamos ya seis ediciones y de ellas han nacido tres libros y, una vez más, un montón de nuevos aprendizajes y Encuentros que me han enriquecido sobremanera. Una vez más, una lista de nombres muy larga en la que debo nombra a Carlos Esteban Garcés, que fue quien me buscó, quien me invitó y me abrió las puertas del Campus.
Y, si has tenido paciencia y llegas hasta este párrafo, llegamos al año 2011 en el que mi vida da otro giro. Conozco a EMILIO. Sucede en el marco del inicio del proceso formativo a profesores de la Compañía de María. El año 2013 me despido de mi querida Vitoria y comienzo nueva etapa vital en Irun (Gipuzkoa). Me caso. Junto a Emilio, descubro día a día lo que es vivir creando hogar en el corazón de la Vida.
Y aquí estoy, en esta pequeña ciudad de frontera, desembocadura hacia Francia... Como en mis primeros pasos. La Vida quiere situarme en las desembocaduras, los lugares de encuentro, de mezcla, de pluralidad...
Veinte años después, la EI es ya un término utilizado por muchísimos educadores/as. Es ya un Posgrado universitario. Se escriben tesis sobre el tema, se dan charlas, se escriben libros...
Para mí: es mi Vida hasta que Dios quiera porque Él /Ella me lo dio y Él/Ella me lo quitará.